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Criterios que mejoran la calidad del servicio y la eficiencia energética en el alumbrado público municipal a lo largo de todo su ciclo de vida

Autor: Carlos De la Fuente Borreguero
Universidad Alfonso X El Sabio
Otros autores: Esther Guervós Sánchez (Universidad Alfonso X El Sabio); Marta Beatriz García García (Universidad Alfonso X El Sabio)
Tipo: Comunicación técnica escrita
Temática: Calidad ambiental; Energía; Urbanismo y edificación
Documentos asociados: Doc. Escrito
Resumen:
El consumo de energía en alumbrado público suele representar en la mayoría de municipios una gran parte de su consumo energético total, por lo que mejorar su eficiencia energética puede suponer un importante ahorro en los presupuestos ordinarios municipales. Pero además de esta motivación económica, existen otras razones a tener en cuenta, tales como: su imagen pública asociada a la administración local, que es quien determina las políticas energéticas que son percibidas muy de cerca por los ciudadanos; y su contribución a la sostenibilidad ya que cada día es mayor la preocupación de las administraciones locales por el desarrollo sostenible, lo que las lleva a incorporar medidas que mejoran la calidad del servicio, la eficiencia energética del alumbrado público y sus efectos medioambientales.

El alumbrado público constituye un servicio cuya importancia reside en los elementos que componen la instalación, su funcionamiento y las prestaciones que es capaz de facilitar a los ciudadanos: la iluminación que proporciona (nivel y calidad), periodos efectivos de funcionamiento, espacios urbanos que abarca, etc., es decir, sus condiciones de servicio en relación con las necesidades del ciudadano.

Por esta razón, el alumbrado público no puede limitarse exclusivamente al momento de su puesta en servicio, sino que han de establecerse consideraciones sobre todos los factores de los que depende y que abarcan todo su ciclo de vida: planteamiento de la necesidad del servicio y su planificación, redacción del proyecto, ejecución de la obra, mantenimiento y explotación de la instalación y, por último, el desmontaje y la eliminación de los residuos.

Las prestaciones de una instalación de alumbrado público experimentan una disminución a lo largo del tiempo y, por tanto, una merma de la calidad del servicio, a causa del envejecimiento propio de sus componentes, fallos, averías y de la acción de agentes externos (climáticos, obras en la vía pública, etc.). El objeto de los planes de mantenimiento es minimizar sus consecuencias y mantener la calidad del servicio y su eficiencia energética.